Los últimos pieles rojas de Juan José Téllez. Editorial Renacimiento. Sevilla 2025. Por Paloma Fernández Gomá

 Los últimos pieles rojas de Juan José Téllez. Editorial Renacimiento. Sevilla 2025. Por Paloma Fernández Gomá 

Juan José Téllez, poeta y amigo ha publicado recientemente su libro Los últimos pieles rojas, un libro que es una bandera blanca para dialogar y poner en tela de juicio todo aquello que acontece en nuestra sociedad, desde una mirada amplia y discursiva que saca la utopía del cajón de los recuerdos y nos dice que no se puede vivir sin entrega, sin añadirle valentía a nuestro discurso y por supuesto, sin proponérselo. Las grandes praderas siguen siendo inhóspitas para quienes las habitan, y si entonces los grandes jefes vivieron la retirada; hoy es todavía más difícil replegarse porque nos quedaríamos desnudos frente a la intemperie de las ideas que sacrifican nuestro futuro. 

Téllez recapacita, habla consigo mismo y nos alerta del peligro de lanzarnos al vacío, debemos de guardar siempre  el grito de guerra como alerta de lo que nos puede suceder.

Bandera blanca de diálogo, de ponerse en la piel del otro y de seguir adelante, enterrando el hacha de guerra, pero jamás ahogando la voz de la pradera, de la libertad que nos hace hombres auténticos sin ataduras a ninguna otra idea que no sea la propia idea, aquella que hemos ido madurando y escalando para convertirnos en lo que somos, aunque muchas veces la consideremos ya caduca, avejentada y con poca energía.

En este viaje mío por el libro de Téllez me apearía en algunos poema, como Las verdes praderas, La canción del olvido o Ubi sunt.

Repostería en Mapa mundi, Almas gemelas, Charnego y Tarjetas doradas.

Parada y fonda en Salve marinera y Fin de partida.

"Y es que desde entonces los dueños te despiertan,/tiemblas en los bares y escupes tormentas de arena./Odias a los bancos igual que a tus recuerdos/ y preguntas por gente que murió hace mucho."

"El tiempo se ha quebrado, el mundo es la derrota,/y yo no traigo a bordo más que deserción./Las pavanas que habían anidado en mi alma/hace mucho que huyeron a ultramar de las sombras."

'"Donde estarán las alegres muchachas salvajes,/los prófugos felices del té de las cinco,/los bravos camareros de la taberna del mar,/los ladrones de libros, los poetas del crimen."

"Los amigo volvían de lugares amables,/cargados de familias o inciertas aventuras./Narraban sucedidos más allá de los tiempos,/donde el recuerdo a veces nos seguía juntando/y me invitaban siempre a seguir su destino/como si no me bastará la pequeña provincia."

"Gasté la última carta del triunfo,/el diamante cosido a la muñeca,/los dados cargados con el plomo/con que marcan su suerte los tahúres./Aposté siempre a caballo perdedor/en los hipódromos de las tentaciones,/con un naipe marcado en la cartera,/con un as en la manga por si valiese./Ahora sólo hago trampas al solitario."

Los versos de Juan José Téllez van discurriendo entre lo cotidiano y lo esencial, acercándose a la verdad pequeña de las cosas que a veces se hacen trascendentes, entre lo humano y lo divino; o es que acaso no es trascendental elevar la poesía a cotas inalcanzables para poner en valor la identidad del hombre, su paso por este mundo y el inmarcesible mensaje de la  poesía de Juan José Téllez.